‘’ ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?’’ Así se titula unos de mis libros favoritos de ciencia ficción del escritor Philip K. Dick. Un libro que posteriormente adaptaría el director Ridley Scott en la película Blade Runner, otra obra maestra de los 80. La cinta narra una historia ficticia sobre un futuro en el que la IA está tan avanzada, que los androides llegan a ser completamente iguales a los humanos e imposibles de distinguir. Algo que, últimamente, también empezamos a imaginar con los avances tan sonados en inteligencia artificial y SEO, creación de contenidos y funcionalidades adicionales en buscadores. Pero en cuanto a la inteligencia artificial y la creatividad, ¿supone la primera una amenaza para la segunda?
¿Sustituirá la inteligencia artificial a los profesionales?
Como en la película de Blade Runner la IA sustituirá a todas las profesiones, incluso a esos trabajos más duros y complejos. De hecho, se comenta que, gracias a DALL-E 2, los diseñadores ya no tendrán trabajo (al menos así lo anuncian sin parar y a modo apocalíptico en las redes sociales). También se comenta cómo los copies, periodistas y escritores acabarán en paro por culpa de la IA de ChatGPT.
Lo cierto es que ya no se puede distinguir si un texto ha sido escrito por una herramienta de IA o por un ser humano, pero, en mi opinión, esto es solo una ilusión. Y es que, que esté preparada para engañar o imitar, no quiere decir que realmente sea inteligente. En esta línea, algunos expertos todavía se están cuestionando qué es exactamente la inteligencia artificial y cómo medirla para poder afirmar, de forma tan rotunda, que hemos conseguido recrearla artificialmente.
Las investigaciones del profesor Hervé Boulard en inteligencia artificial y creatividad
Como dice el profesor Hervé Bourlard, director de Idiap Research Institute, un referente a nivel mundial en inteligencia artificial (que parezca realmente inteligente) no quiere decir que sea inteligente ‘de verdad’. De hecho, Boulard sostiene que un niño de 3 o 4 meses puede hacer cosas que una IA nunca será capaz de hacer. Y pone como ejemplo esta situación: un niño ve un vaso de agua en una mesa y sabe que si lo vuelca se derramará y se quedará sin agua, pero disfruta al hacerlo, disfruta del proceso en sí. Esto es algo que, según el experto, ninguna máquina entenderá jamás.
Pero Boulard también alude al sentido común, una habilidad que, según él, nunca tendrán estas apps o herramientas. En cambio, lo que sí puede hacer es ayudar en tareas complejas que requieren de grandes cálculos, análisis de datos o aprendizajes automáticos. Estas sí que seguro simplificarán todos los procesos.
¿Os imagináis tener un compañero extremadamente analítico, con una gran capacidad de cálculo, pero sin un ápice de sentido común? Seguro que es una combinación que, sin supervisión, seguro llevaría al desastre. ¿Dejaríais vuestra confianza en manos de una persona sin sentido común? Seguro que lo pensaríais dos veces antes de delegar tareas tan importantes…
La IA es, y será, siempre una herramienta, un medio para llegar a un fin, pero nunca el fin en sí mismo (bueno, vamos a decir en mucho tiempo, que me gusta demasiado la ciencia ficción como para decir nunca…). ¿Quién sabe si, algún día, se hará realidad la película de Ridley Scott o la de James Cameron? ¿O si tendremos como vecino a un T800 con la cara de Arnold Schwarzenegger cortando el césped y dándonos los buenos días? Sin duda, la IA se está convirtiendo en una gran herramienta, y por eso tenemos que ser conscientes de sus capacidades y de sus limitaciones para utilizarla de un modo correcto y responsable.
El impulso de la inteligencia artificial en la actualidad: el peso de la publicidad
Pero, para mí, lo más interesante de todo esto es confirmar cómo ha llegado a estar en boca de todos y tener una relevancia a nivel mundial. Que todos hablemos de ella, que no quede una publicación en cualquier medio sin mencionar la IA. No es por sus capacidades o por su tremendo avance de la noche a la mañana. De hecho, las investigaciones en inteligencia artificial acumulan más de 67 años en marcha. Por tanto, la notoriedad es gracias a la publicidad y al marketing; ese es el verdadero secreto de la IA: hacer uso de la publicidad para resaltar sus grandezas haciendo, al mismo tiempo, que la información sea accesible a todo tipo de personas.
La IA ya ha comenzado a irrumpir en varios sectores del marketing: puedes utilizarla para mejorar el posicionamiento orgánico de tu site o aplicarla a tu estrategia de social media, tal y como te contamos en nuestro artículo sobre inteligencia artificial y redes sociales.
Por ejemplo, una buena campaña puede ‘hacer maravillas’ en un producto o servicio ya que, al final, la palabra es una fuerza muy poderosa. Nada como una buena idea, un buen copy y una buena imagen. En definitiva, una buena campaña ‘para que todo el mundo hable de nosotros’. Lo cierto es que esto genera un resultado muy bueno, y es por eso, que no solo tenemos la IA en todos los medios, sino que, muchos otros se están sumando a esta tendencia: relojes inteligentes, móviles inteligentes, hasta neveras inteligentes ¡parece que deseamos ‘que todo sea inteligente’!
Al final, parecemos nosotros los que soñamos con máquinas inteligentes, con disponer de máquinas que hagan por nosotros cualquier tipo de tarea, con delegar todo y llegar la productividad perfecta. Parece que queramos dedicarnos al ocio, al esparcimiento continuo, al descanso… pero los sueños, sueños son.
Como ves, en ROI UP GROUP nos gusta mucho el marketing, la publicidad y la IA, así como hacer campañas de las que hable todo el mundo. Si quieres, te contamos cómo lograr que hablen de ti. Contacta con ROI UP y te ayudaremos.
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