ROI UP Academy presentó el pasado jueves 16 de julio su webinar sobre los impactos de la crisis de la  COVID-19 en el sector juguetes. Durante la sesión se debatió sobre los diferentes factores que influyeron en el consumo de juguetes y la adaptación de los distintos players del sector ante la nueva situación.

Gabriel Ferrer, Adjunto a Dirección General en ROI UP Group, moderó la jornada de la mano de ponentes de gran representación en el sector juguetero como Miniland, EPOCH y AIJU (Instituto Tecnológico de producto infantil y ocio).

  1. Juguetes en tiempos del Covid.

De la mano de Pablo Busó, responsable del área de investigación del usuario en AIJU, comenzamos la jornada con una visión más cercana de los cambios que ha producido el confinamiento en la manera en la que los niños interactúan jugando.

El tiempo de juego ha aumentado junto con el tiempo de uso de la tecnología. Los juegos interactivos y las video llamadas han pasado a formar parte de los hábitos diarios de los más pequeños. Por su lado, los juegos en línea han servido para romper la barrera que el confinamiento impuso a los pequeños en sus relaciones sociales con sus amigos y compañeros de clase.

El lado negativo de esta situación es que ha aumentado el tiempo de exposición a pantallas y aparatos tecnológicos, aumentando la importancia del control y supervisión de los adultos en los juegos de los menores, y siendo fundamental una concienzuda selección de los juegos con los que van a interactuar.

  1. Transformación Digital: eCommerce.

Con la crisis de la COVID-19, las empresas jugueteras han sufrido un fuerte golpe en sus planes para 2020, forzando a dar un giro 360º a sus estrategias de marketing y venta, en las que la pata digital juega ahora un papel protagonista.

Para tratar el impacto del confinamiento y de la nueva realidad en el sector de los juguetes, contamos con Rosa Torres, Directora Comercial de Miniland (empresa líder en España en el mercado del juguete educativo); y con Juan Pedro Devesa, CEO de la filial para Iberia de EPOCH (multinacional japonesa líder en juegos).

Rosa nos contó la situación en la que se encontró Miniland tras el cierre de colegios y jugueterías, forzando a la empresa a cambiar por completo su enfoque de ventas para 2020. Hay que tener en cuenta que, a pesar de los juguetes free-play (juegos no dirigidos), una gran parte del consumo de los juegos educativos recae en el sector educativo.

El comercio online ha jugado un papel esencial en planteamiento estratégico de Miniland. Su ecommerce le ha permitido la venta de producto a uno de sus targets principales, los padres. Sin embargo, Rosa también destacó el importante papel que han jugado los retailers, sabiendo adaptarse poco a poco a la situación por medio de comercio online, empujando así el consumo y reaventándose para el futuro.

Juan Pedro también nos dio su visión de la situación y nos contó cómo fue la experiencia del lanzamiento de un producto nuevo con Super Mario Games, a punto de llegar al mercado español, y cómo fue encontrarse los puertos cerrados. También hizo hincapié en la importancia de la adaptación de las tiendas físicas a la nueva situación y cómo el poder resolutivo de los diferentes partners ha servido para lograr dar una vuelta a la situación y amortiguar el golpe que el confinamiento ha supuesto.

También destacó el aumento del consumo familiar de juguetes, como necesidad para mantener a los niños ocupados y ayudar a favorecer su desarrollo por medio del juego y lograr que se evadieran de la situación de encierro. 

  1. Takeways, retos de la industria juguetera en la nueva normalidad.

Algunos de los insights más destacables de la jornada se comentaron tras hacer a los ponentes la pregunta ¿Qué cambios habéis detectado en clientes y consumidores?

Rosa nos contaba como sus comunicaciones, sobre todo en plataformas como Instagram, eran mucho más visuales y pensadas para padres sin tiempo para estar leyendo detenidamente el contenido publicado. Sin embargo, la nueva coyuntura cambió la demanda de información del consumidor, qué ahora podía dedicar más tiempo al ocio en familia. Esto ha tenido importantes repercusiones en el aumento de las estrategias de email marketing.

Por otro lado, Juan Pedro nos comentaba como el consumidor ha dedicado más tiempo a pensar el tipo de juguete que se pone al niño en la mano. La situación ha revalorado la importancia del juguete tradicional, aumentando su consumo.

Ahora el sector juguetero se encuentra ante nuevas barreras en el terreno offline, como es el miedo de los consumidores a asistir a grandes superficies para comprar, lo que tiene un tremendo efecto negativo en las ventas de las tiendas físicas.

La importancia de las plataformas online, ya sea a nivel de catálogo de producto o como canal de venta directa, ha crecido de tal manera que se ha convertido en el salvavidas del sector. Lo que era una realidad transicional se ha convertido, post-COVID, en un catalizador que ha acelerado la situación actual del sector juguetero.