En la última conferencia anual de Facebook F8, celebrada el pasado 30 de abril y 1 de mayo en California, Mark Zuckerberg anunció nuevos productos, actualizaciones y cambios en algunas de sus aplicaciones. En este último punto es donde nos vamos a centrar, en concreto lo que afecta a los likes de Instagram.

Zuckerberg sentó cátedra y dijo frases como: “el Futuro es privado”.  ¿Quién nos iba a decir que él mismo pronunciara estas palabras tras el escándalo de privacidad en el que se vio involucrado hace tan solo un año?

Así, presentó una de las actualizaciones que más controversia ha generado. Y no es más ni menos que ocultar los likes que se generan en cada una de las publicaciones de una de sus aplicaciones estrella, Instagram. ¿Qué, qué? Lo que oyes, pero don’t worry todo tiene un porqué y las cuentas de empresa tenemos otros parámetros más fiables que los injustos (en ocasiones) likes, ¿verdad?

Actualmente, esta red social acumula más de 1.000 millones de usuarios activos, siendo la aplicación con mayor crecimiento y siendo la única que ha duplicado su número de usuarios en los últimos 2 años.  Además, los instagramers generamos más 3,5 billones de likes cada día. Entonces, teniendo tal éxito ¿qué ha llevado a tomar la decisión de eliminar los likes? Básicamente se trata de tres factores:

  1. Combatir el mal uso y toxicidad en esta red social, siendo una medida de contención contra el bullying.
  2. Apreciar el contenido sin estar sugestionados por la popularidad de la pieza.
  3. Ensalzar la privacidad, parafraseando a Zuckerberg: “la privacidad nos da la libertad de ser nosotros mismos”.

Según el estudio publicado en Psychological Science, los “likes” afectan a nuestro cerebro, de forma que cada vez que se recibe “un like” se activa el núcleo accubens septil, encargado de activarse en los momentos de placer intenso, dando lugar a la aparición de adicciones con la intención de que este estímulo se repita. Además, muchos de los usuarios al publicar una foto-vídeo experimentan el efecto contrario. Si reciben menos “likes”, de los esperados, en su contenido, les hace sentir una terrible infelicidad, llegando incluso a borrar sus publicaciones por no tener una suficiente aprobación popular. Además, de esta reacción espontánea neurológica, de auto boicot, nos enfrentamos al acoso por parte de otros usuarios. Según el estudio realizado por Ditch The Label se confirmó que Instagram era la red elegida para abusar online, ya que más de un 42% de jóvenes entre 12 y 20 años ingleses lo sufrieron.

Por otra parte, la ausencia de likes permitirá al usuario abstraerse en la foto o vídeo y no en la popularidad de la publicación. Con esta premisa, volveremos al origen de los “likes” como “estoy de acuerdo” y no en la nueva tendencia de  “validación social” en esta etapa de la “dictadura del like. Desde la celebración del F8, Canadá ha sido el país elegido para eliminar el total de likes de las fotos o vídeos. Sin embargo, el usuario del perfil podrá conocer el número de likes en su contenido, pero sus seguidores no.

Si bien es cierto que una de las necesidades básicas del ser humano es la aceptación del entorno social, hay que tener en cuenta que con la aparición de las redes sociales hemos perdido un territorio de nuestra intimidad, es decir, donde antes solo nuestro entorno más cercano sabía nuestros últimos pasos (vacaciones, amigos, hitos personales o profesiones, etc.), ahora ese círculo ha incrementado notablemente llegando incluso a ser ilimitado con los perfiles públicos. Incrementando, así, la presión de aceptación social.

¿Y tú que piensas de esta actualización: a favor de poner cordura en la era del egocentrismo exagerado o en contra de esta nueva actualización paternalista?

Os leemos y nuestros seguidores también ?