Son apenas 7 segundos. David Bisbal sale trajeado en rosa de uno de sus vibrantes conciertos mientras unos pocos fans esperan ansiosos su llegada. Todo muy rutinario para el almeriense. Pero entonces se produce la magia: “Bueno, cómo están los maquinas, lo primero de todo. ¿Estáis bien? Venga, vamos a echarnos una fotillo…”. Así de simple. A partir de ahí la locura total, millones de comentarios, memes, likes, reacciones incluso más allá del mundo digital (prensa escrita, televisión tradicional, radio…). El más reciente, Carlitos Alcaraz tras ganar el Open de Madrid, replicando las manidas palabras a la afición mundial y provocando una carcajada general que aún resuena. En el mundo anglosajón aún deben de estar preguntándose dónde estaba la tremenda gracia del comentario. Lo sentimos, amigos no latinos, estas son nuestras cosas, no intentéis entenderlo.

Algunos de los vídeos a raíz del de Bisbal han tenido casi tanto éxito como su predecesor. Como el que se trabajaron 19 reconocidos actores de doblaje y que Hermoti subió a su cuenta de Twitter con nada menos que 4 millones de visualizaciones. La viralidad surge cada día con mayor o menor fortuna y casi todo el mundo en redes sociales sueña con petarlo alguna vez. 

 

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Las redes sociales, el motor de la viralidad

Lo viral no es nada nuevo, hace ya más de una década que el término comenzó a rondar en nuestras vidas. Incluso se colaron en los briefings y un cliente solicitaba un vídeo viral como si fuese como cualquier otra pieza publicitaria. Al principio eran comentarios en realities televisivos, tweets, Youtube o publicaciones de Facebook. El abanico en 2023 es mucho más amplio con Twitch y sobre todo TikTok marcando la tendencia. Si algo está claro es que las redes sociales son el gran impulso que propulsan cualquier contenido a la estratosfera.

El fenómeno define muy bien el consumo de contenido de nuestro tiempo; prima la inmediatez y lo espontáneo, la superficialidad, la cantidad, lo nuevo, el humor… ¿Significa eso que la cultura más tradicional pierde fuelle frente a lo viral? En absoluto, existe mucho espacio de convivencia con la cultura más profunda e intelectual, pero es innegable que la cultura digital basada en el algoritmo y lo viral se abre paso a cada segundo.

No siempre es un fenómeno espontáneo, a veces se ve venir. El rencor de Shakira hacia su ex que Bizarrap tradujo en un hit sin precedentes es el mejor ejemplo para demostrarlo. Se anunció su salida a los cuatro vientos y el día del estreno todo el planeta estaba ansioso por darle al play. Y vaya si lo petó, las cifras marean: 537 millones de visualizaciones en Youtube hasta el momento, ahí es nada. 

TikTok, programado para hacerse viral

Si hay una red social que es una auténtica fábrica de virales esa es TikTok. La joven red social china creada en 2016 experimentó un boom a raíz de la pandemia y los confinamientos de 2020. Desde entonces sus cifras de usuarios y popularidad no han dejado de crecer. En TikTok podemos encontrar contenido de todo tipo pero sobre todo destaca por su potente algoritmo que selecciona cuidadosamente lo que considera de interés para cada usuario. El contenido es variado: bailes, recetas, doblajes, bromas, reacciones, experiencias comentadas, challenges… 

Algunas de las claves para ser viral TikTok son:

  • La espontaneidad: vídeos cortos y directos, con muchas herramientas que los hacen fáciles de hacer y de consumir. En TikTok no se llevan las mega producciones. La gente se identifica con los creadores fácilmente y siente el “ yo también puedo hacerlo”.
  • El timeline vertical y su experiencia de usuario infinita que entretiene sin límites y atrapa durante horas. Instagram ha tratado de replicarlo tal cual con Reels.

Recientemente, Forbes desveló un secreto a voces: algunos vídeos en TikTok se viralizan directamente por la plataforma, una magia que viene dictada directamente por intereses comerciales. Nada nuevo bajo el sol aunque confirmado por algunos ex empleados. Pero lo cierto es que hay muchos ejemplos de personas anónimas que en muchos casos sin quererlo ni beberlo dan con una fórmula mágica que dispara las visualizaciones de sus producciones caseras. Ahí tenemos por ejemplo a Patica zampando como si no hubiese mañana con 1.5 millones de seguidores. Nosotros, los Roiupers, tampoco pensamos que con este vídeo llegaríamos a los 2.1 millones de visualizaciones pero esa es la genialidad de TikTok.

@roiupers Tipos de personas en la oficina 😜 #personasincreibles #somosdiferentes #cadacualalosuyo😄 #oficinatiktok ♬ Monotonía – Shakira & Ozuna

La fiebre por la viralidad

¿Qué estarías dispuesto a hacer por volver tu vídeo viral? Algunos no se ponen límites para alcanzar cifras de likes o visualizaciones por encima de la media. Una tendencia reciente se basa en parecer el invitado estrella de un podcast y decir algo fuera de lo común, que descoloca por lo extravagante como en el siguiente ejemplo. Los haters rápidamente saltarán a la palestra brutalmente indignados, otros se reirán y otros pueden hasta creérselo pero por el camino las visualizaciones subirán como la espuma.

@desanpedroCuando no creces, decreces. Sal de la zona de confort.♬ Cornfield Chase – Dorian Marko

viral en tiktok

Si hablamos de magos de la viralidad hay un líder indiscutible que con 25 años y 150 millones de suscriptores (sí, has leído bien) se ha consagrado como el mejor Youtuber hasta el momento. Hablamos de Mr Beast, Jimmy Donaldson para su familia, que lleva media vida dedicado a crear vídeos virales. Afincado en Raleigh (Carolina del Norte) se ha especializado en retos imposibles, sorteos de cantidades astronómicas o hazañas como enterrarse vivo durante 50 horas. 

Su éxito no vino de repente. El pequeño Jimmy estuvo muchos años haciendo vídeos hasta que Counting to 100.000 (en el que literalmente contaba hasta 100.000) disparó su popularidad y seguidores. A partir de ahí el ascenso ha sido meteórico con montones de vídeos que de manera simplona pero ultra efectiva logran conectar con los sueños de su imponente audiencia. En el caso de Mr Beast, sus vídeos tienen ahora una inversión de dinero apabullante. Es ya un empresario de los que se estudian en las universidades más prestigiosas. ¿Sus claves? Según él mismo, la intuición por la viralidad basada en años de experiencia, el esfuerzo y la constancia a pesar del fracaso y el contenido positivo sin críticas ni burlas a otros. 

Efectivamente no hay una fórmula mágica para la viralidad, a veces surge espontáneamente pero cuando de verdad se busca es cuestión sobre todo de esfuerzo, talento y experiencia. ¿Cuál será la próxima genialidad que nos haga pasarlo en grande a todos? Hagan sus apuestas.